Redacción (Miami)
En la antigüedad, el cielo era el oráculo de la época y una referencia para las personas. Permitía predecir el estado del tiempo, planificar los cultivos y hasta los viajes. Hoy, la Astronomía estudia a cabalidad el universo. Además de los 5 mejores sitios de Uruguay para ver las estrellas te proponemos 5 lugares alternativos para descubrir por ti mismo los secretos “escritos” en el cielo.
La historia de la Astronomía es tan antigua como la historia del ser humano. El hombre primitivo estaba directamente influenciado por los fenómenos celestes. El ciclo de las estaciones, los eclipses, cometas, meteoros, entre otros, incidían en la vida de los pueblos. Así por ejemplo la aparición de un astro permitía anticipar la llegada de la temporada de lluvia o de sequía.
Estudios demuestran que los Cerritos de los Indios en Rocha guardaban relación con los cielos que observaban. Debido a ello su orientación se referencia en base a la Cruz del Sur y la Vía Láctea por citar algunos ejemplos. Ahora te sugerimos un tour por el cielo nocturno de 5 escenarios uruguayos que seguro despertarán tus sentidos más primarios.
1. Cabo Polonio, Rocha
El Parque Nacional Cabo Polonio es un gran encantador de espíritus bohemios por conservar características típicas del paisaje de la costa atlántica uruguaya, previo al proceso de transformación que se inició a mediados del siglo XX. No hay alumbrado público, lo que permite la observación del cielo estrellado a pleno. No hay calles sino senderos irregulares que vinculan las casitas pequeñas y rudimentarias. El ingreso se realiza en vehículos todo terreno, especialmente acondicionados para no dañar el paisaje natural.
A nivel de paisaje, dunas gigantescas, playas arenosas, puntas rocosas, bosque nativo costero y pequeñas islas repletas de lobos marinos forman parte de los encantos del lugar.
2. Villa Serrana, Lavalleja
Situada en el medio de las sierras de Lavalleja, a 25 kilómetros de Minas, este pequeño pueblo regala noches estrelladas únicas, que se aprecian aún más desde el barrio donde se encontraba el observatorio astronómico “Eta Carinae” -actualmente cerrado- y bautizado entre los locatarios como el barrio “Observatorio”. Desde allí se puede participar de las jornadas de observación denominadas “Planetario a cielo abierto”, organizadas por la Sociedad Astronómica Octante, integrada por amigos, aficionados y profesionales de la Astronomía que frecuentan el lugar.
Su tranquilidad invita al encuentro con uno mismo y la naturaleza. Entre los paseos favoritos ofrece recorrer el Parque del Salto del Penitente, visitar el parador Ventorrillo de la Buena Vista, la gruta del Padre Pío, sentarse a tomar el tradicional mate a orillas del lago del embalse, caminar por el entorno agreste, practicar senderismo por el valle del Hilo de la Vida y andar a caballo por todos sus rincones.
3. Cerro Arequita, Lavalleja
Enormes rocas de 120 millones de años que yacen a 12 kilómetros de la ciudad de Minas te harán sentir la inmensidad de la naturaleza y el valor del cielo estrellado que las acompaña.
Esta curiosidad geológica, que alcanza una altura de 505 metros, tiene en su interior diversas grutas que cautivan al visitante. En la base del cerro se encuentra el parador El Mirador, que ofrece comidas caseras y visitas guiadas. Muy cerca está ubicado el camping municipal con cabañas y servicios completos o bien el que está en la base de la Laguna de los Cuervos, más pequeño y de perfil muy familiar.
4. Quebrada de los Cuervos, Treinta y Tres
Si buscas respirar aire puro y sentir que te “sumerges” en la naturaleza, se volverá uno de tus destinos favoritos con sólo presenciar la majestuosidad de su paisaje y cielo oscuro. Este paraíso escondido es un accidente geográfico que combina una garganta abierta por el arroyo Yerbal Chico y sierras agrestes.
Un destino de aventura, infaltable para experimentar la naturaleza desde cerca y apreciar más de 180 especies de aves registradas hasta el momento y numerosa variedad de mamíferos, anfibios y peces.
Entre los servicios disponibles en la quebrada se encuentran: senderismo, avistamiento de aves, actividades de educación ambiental, centro de visitantes, servicio de guardaparques, camping y cabañas. También existen algunas restricciones, dado que es un Área Natural Protegida: como el ingreso con mascotas, la caza, la pesca, las fogatas y la recolección de plantas.
5. Barrancas de San Pedro, Colonia
Se trata de una porción de 8 km de costa en el departamento de Colonia, entre el río San Juan y el arroyo San Pedro, donde existen barrancas de hasta 15 metros de altura de alto valor paleontológico. Allí, sobre la barranca o en los trozos que se han desprendido de ellas y que ahora yacen sobre la arena, se pueden encontrar restos fósiles y moldes de moluscos. Todo esto es parte de la formación Camacho, sedimentos de la era Terciaria, que tienen entre 5 y 11 millones de años y están al descubierto…, es sólo mirar.
La bajada a la playa es por Brisas del Plata, un pintoresco camping que ofrece la posibilidad de hospedarse a metros de la costa, con todos los servicios. Dada la cercanía a Colonia del Sacramento y Buenos Aires, existen cúpulas de contaminación lumínica en el horizonte (salvo hacia el Este), pero el cielo mantiene un grado de oscuridad que permite disfrutar de muchísimas estrellas y hasta la Vía Láctea a simple vista.