Tamara Cotero
El espíritu navideño nos empieza a invadir y comenzamos a pensar en las cenas de Navidad, menús navideños, las decoraciones, las cartas a Papá Noel y Los Reyes Magos … y como tenemos unos días libres a la vuelta de la esquina, una escapada navideña es lo que más nos apetece ahora.
Praga es considerada una de las capitales con más encanto y belleza de Europa se vuelve especialmente mágica durante la temporada de Navidad.
Para 2022 el tema visual principal de los mercados es la Navidad angelical, que llevará al corazón de la capital checa motivos de brillantes de ángeles dorados y querubines que flotarán sobre las cabezas de los visitantes. Además también pondrán especial énfasis por ser lo más considerados posible con el medio ambiente. Todos los refrescos comprados y el material de venta utilizado en los mercados serán 100% BIO y compostables.
El mercadillo más grande y más popular tradicionalmente tiene lugar en la Plaza de la Ciudad Vieja, que se está convirtiendo en la zona principal durante las festividades de Navidad. Cada año la encabeza un enorme árbol navideño, traído de uno de los rincones de la República Checa, y lo visitan miles de personas. Decenas de personas, con una copa de vino caliente en la mano, se pasean por los puestos de productos nacionales checos, de adornos hechos a mano o apetitosos manjares desde almendras garrapiñadas hasta los excelentes embutidos y salchichas (párky y klobásy).
La artesanía tradicional es digna de admiración, tales como la fabricación de espadas, y también se puede disfrutar del amplio repertorio de villancicos navideños. Cada año, los mercadillos navideños enamoran con su decoración y ambientación. Lo importante es el verdadero ambiente navideño con su aroma a canela y clavo. Durante la época navideña, podrás disfrutar de un exquisito svařák (vino caliente), un aromático trdelník (rollito de galleta), un licor de miel caliente o un sabroso jamón asado en varias zonas de Praga. Si hablamos de mercadillos famosos, el segundo en discordia es el de la plaza de Wenceslao, la plaza más alargada del mundo con 750 metros de longitud. Ya en la Ciudad Nueva, pero a escasos 12 minutos a pie del anterior mercado, los puestos se ubican a lo largo del “bulevar” que forma la plaza, con el imponente edificio del Museo Nacional de fondo. De nuevo, abundan las opciones gastronómicas, con especial mención a las curiosas espirales de patatas fritas.
El tercer gran mercado de Praga es el de la céntrica plaza de la República, el cual forma un triángulo perfecto con los dos anteriores. Frontera natural entre la Ciudad Vieja y la Ciudad Nueva. Además, aquí podremos encontrar otros dos platos típicos de la cocina checa: las sopas y los guisos. De hecho, y a modo de curiosidad, las primeras puedes llegar a encontrarlas servidas en el interior de grandes panes convertidos en cuenco. Desde el 26 de noviembre hasta el 6 de enero, podemos disfrutar de los mercadillos navideños que esta ciudad mágica nos ofrece. Y es que Praga siempre deja huella y sobre todo… en Navidad.