Redacción (Madrid) Stonehenge, ubicado en la llanura de Salisbury en Wiltshire, Inglaterra, es uno de los monumentos megalíticos más famosos y misteriosos del mundo. Este impresionante círculo de piedras, cuya construcción se remonta a la Edad de Bronce y Neolítico, ha fascinado a arqueólogos, historiadores y visitantes durante siglos.
La construcción de Stonehenge se llevó a cabo en varias fases a lo largo de aproximadamente 1,500 años. Las primeras fases datan de alrededor del 3000 a.C., cuando se erigió un gran banco circular de tierra con una zanja. Las piedras icónicas que forman el círculo interior y los trilitos se colocaron en fases posteriores, alrededor del 2500 a.C.
Stonehenge está compuesto por dos tipos principales de piedras: los grandes sarsens, que pesan hasta 25 toneladas y provienen de Marlborough Downs a unos 32 kilómetros de distancia, y los más pequeños “bluestones”, que se cree que fueron transportados desde las colinas de Preseli en Gales, a más de 200 kilómetros de distancia. La logística de transportar y erigir estas piedras gigantes sigue siendo un misterio y un testimonio de la habilidad y organización de las comunidades prehistóricas.
El propósito exacto de Stonehenge sigue siendo objeto de debate y especulación. Algunas teorías sugieren que pudo haber sido un lugar de culto religioso, un sitio de entierro o un centro de curación. Sin embargo, una de las teorías más aceptadas es que Stonehenge funcionaba como un observatorio astronómico. La alineación precisa de las piedras con los solsticios de verano e invierno indica que los constructores tenían un profundo conocimiento de los ciclos solares.
Durante el solsticio de verano, el sol sale exactamente por encima de la piedra del talón, una piedra alta ubicada fuera del círculo principal, proyectando su luz directamente en el centro del monumento. Este evento sigue atrayendo a miles de personas cada año, quienes se congregan para presenciar el amanecer en este sitio histórico.
Stonehenge ha sido objeto de numerosas excavaciones arqueológicas y estudios científicos. Desde las primeras excavaciones en el siglo XVII hasta los proyectos de investigación más modernos, cada descubrimiento ha aportado nueva información sobre el monumento y la gente que lo construyó. Los recientes estudios utilizando técnicas avanzadas de radar de penetración terrestre han revelado estructuras subterráneas y otros monumentos cercanos, sugiriendo que Stonehenge formaba parte de un complejo ceremonial más amplio.
La isla de Rodas, ubicada en el mar Egeo, es una joya de Grecia que combina una rica historia con paisajes impresionantes y playas de ensueño. Conocida como la isla del sol debido a su clima agradable, Rodas es un destino turístico que ofrece algo para todos, desde ruinas antiguas y castillos medievales hasta una vibrante vida nocturna y actividades al aire libre. Este ensayo turístico explorará las maravillas de Rodas, destacando sus principales atracciones y la experiencia única que ofrece a sus visitantes.
Uno de los mayores atractivos de Rodas es su ciudad medieval, declarada Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO. La ciudad, rodeada por impresionantes murallas de piedra, es un testimonio vivo de la rica historia de la isla. Pasear por sus calles empedradas es como viajar en el tiempo. La Calle de los Caballeros es una de las más famosas, flanqueada por antiguas posadas que albergaban a los caballeros de la Orden de San Juan. En el corazón de la ciudad se encuentra el majestuoso Palacio del Gran Maestre, una fortaleza reconstruida en el siglo XX que ahora alberga un museo con artefactos y exposiciones sobre la historia de Rodas.
A unos 50 kilómetros al sur de la ciudad de Rodas se encuentra Lindos, un pintoresco pueblo conocido por su impresionante acrópolis. Situada en una colina que domina el mar, la Acrópolis de Lindos ofrece vistas panorámicas que quitan el aliento. La subida puede ser un desafío, pero la recompensa es inmensa: templos antiguos, como el de Atenea Lindia, y restos de fortificaciones medievales. Las estrechas calles de Lindos están llenas de casas encaladas, tiendas de souvenirs y restaurantes que ofrecen deliciosa comida griega.
Rodas es famosa por sus playas, que se extienden a lo largo de su costa de 220 kilómetros. Entre las más populares está la playa de Tsambika, conocida por su arena dorada y aguas cristalinas. Es un lugar ideal para relajarse, nadar y practicar deportes acuáticos. Otra playa destacada es la de Faliraki, que ofrece una amplia gama de actividades, desde el windsurf hasta el paravelismo. Para aquellos que buscan una experiencia más tranquila, la playa de Prasonisi en el extremo sur de la isla es perfecta, especialmente para los amantes del windsurf y el kitesurf debido a sus vientos constantes.
Una de las atracciones naturales más encantadoras de Rodas es el Valle de las Mariposas, ubicado en la parte occidental de la isla. Este valle es un refugio natural donde miles de mariposas se reúnen cada verano. Los visitantes pueden caminar por senderos sombreados y cruzar puentes de madera mientras observan las mariposas revolotear a su alrededor. Es un lugar de una belleza serena y una visita obligada para los amantes de la naturaleza.
El Monasterio de Tsambika, situado en una colina con vistas espectaculares, es otro punto de interés. Según la leyenda, las mujeres que tienen dificultades para concebir a menudo rezan aquí, y muchas han regresado para agradecer tras haber tenido hijos. El monasterio ofrece una combinación de espiritualidad, historia y vistas panorámicas del entorno.
Rodas no solo es rica en historia y belleza natural, sino que también ofrece una vibrante vida cultural. Los festivales y eventos locales, como el Festival Medieval de Rodas, celebran la rica herencia de la isla con recreaciones históricas, música y danzas tradicionales.
La gastronomía en Rodas es una delicia para los sentidos. Los restaurantes y tabernas de la isla ofrecen una amplia variedad de platos típicos griegos, como el souvlaki, el moussaka y el pescado fresco. No se puede dejar de probar el vino local y los postres, como el baklava y el loukoumades.
Rodas es una isla que cautiva a sus visitantes con su mezcla de historia, cultura y belleza natural. Desde la fascinante ciudad medieval y la majestuosa Acrópolis de Lindos hasta las playas doradas y los paisajes tranquilos del Valle de las Mariposas, Rodas ofrece una experiencia única que combina el pasado y el presente. Ya sea explorando sus ruinas antiguas, disfrutando de su gastronomía o simplemente relajándose bajo el sol, Rodas es un destino que promete dejar recuerdos imborrables a todos sus visitantes.
Las Siete Maravillas del Mundo Antiguo son un conjunto de impresionantes construcciones arquitectónicas y artísticas que los antiguos griegos consideraban las más sobresalientes de su tiempo. Estas maravillas no solo representan la destreza técnica y la creatividad de las civilizaciones antiguas, sino que también simbolizan el deseo humano de dejar una huella perdurable. Este ensayo turístico explorará cada una de estas maravillas, ofreciendo una visión detallada de su historia, arquitectura y legado cultural.
Ubicada en la meseta de Giza, en Egipto, la Gran Pirámide es la única de las siete maravillas que ha sobrevivido hasta nuestros días. Construida alrededor del año 2580 a.C. como tumba para el faraón Keops, esta monumental estructura es un testimonio de la habilidad y la organización de los antiguos egipcios. Con una altura original de 146,6 metros, fue la estructura más alta del mundo durante más de 3.800 años. La precisión en la alineación de sus bloques y la sofisticación de su diseño interno reflejan un conocimiento avanzado de geometría y astronomía.
Considerados por algunos historiadores como una creación mítica, los Jardines Colgantes de Babilonia supuestamente fueron construidos en el siglo VI a.C. por el rey Nabucodonosor II para su esposa, Amytis. Se decía que estos jardines, ubicados en la ciudad de Babilonia (actual Irak), eran una serie de terrazas elevadas llenas de exuberante vegetación, alimentadas por un ingenioso sistema de irrigación. Aunque no se ha encontrado evidencia arqueológica concluyente de su existencia, los relatos antiguos describen un paraíso terrenal que maravillaba a todos los que lo veían.
Esta imponente estatua fue creada por el escultor griego Fidias alrededor del año 435 a.C. para el Templo de Zeus en Olimpia, Grecia. La estatua medía aproximadamente 12 metros de altura y estaba hecha de marfil y oro. Representaba a Zeus, el rey de los dioses griegos, sentado en un trono ornamentado. La majestuosidad y el detalle de la estatua hicieron de ella una de las obras de arte más celebradas de la antigüedad. Desafortunadamente, la estatua fue destruida durante el siglo V d.C., posiblemente en un incendio.
El Templo de Artemisa, también conocido como Artemision, estaba ubicado en la ciudad de Éfeso (actual Turquía). Construido y reconstruido varias veces debido a incendios y destrucción, la versión más famosa del templo fue completada alrededor del año 550 a.C. Este enorme templo, dedicado a la diosa griega Artemisa, era famoso por sus magníficas columnas de mármol y su decoración intrincada. Aunque fue destruido por los godos en el 262 d.C., las ruinas del templo aún se pueden visitar hoy, ofreciendo un vistazo al esplendor de la arquitectura griega antigua.
Este majestuoso sepulcro fue construido entre el 353 y el 350 a.C. en Halicarnaso (actual Bodrum, Turquía) para Mausolo, un sátrapa del Imperio Persa, y su esposa Artemisia. Diseñado por los arquitectos griegos Sátiro y Piteo, el mausoleo se elevaba a unos 45 metros y estaba decorado con esculturas de los mejores artistas de la época. La estructura combinaba elementos de arquitectura griega, egipcia y licia, y su nombre ha dado origen al término «mausoleo». Aunque fue destruido por terremotos durante la Edad Media, sus restos aún evocan la grandeza de su diseño original.
El Coloso de Rodas era una gigantesca estatua del dios sol Helios, erigida en la isla de Rodas, Grecia, alrededor del año 280 a.C. La estatua, que medía aproximadamente 33 metros de altura, fue construida para celebrar la victoria de Rodas sobre el rey Demetrio Poliorcetes. Aunque solo se mantuvo en pie durante 54 años antes de ser destruida por un terremoto, el Coloso se convirtió en un símbolo de la resistencia y la creatividad humana. Sus restos permanecieron en el puerto de Rodas durante más de 800 años antes de ser vendidos como chatarra.
Construido en la isla de Faros, frente a la ciudad de Alejandría, Egipto, el Faro de Alejandría fue completado alrededor del año 280 a.C. bajo el reinado de Ptolomeo II. Con una altura estimada de entre 100 y 130 metros, fue una de las estructuras más altas del mundo antiguo. El faro no solo servía como guía para los marineros, sino que también era un símbolo de la grandeza de Alejandría. Su luz, generada por un fuego en la cima, podía verse a kilómetros de distancia. El faro fue gravemente dañado por varios terremotos y finalmente desapareció en el siglo XIV.
Las Siete Maravillas del Mundo Antiguo son un testimonio del ingenio, la ambición y la creatividad de las civilizaciones que las construyeron. Aunque la mayoría de estas maravillas ya no existen, sus historias continúan fascinando e inspirando a personas de todo el mundo. Visitar los sitios donde alguna vez se alzaron estas increíbles estructuras es una experiencia única que permite a los turistas conectarse con el pasado y apreciar los logros extraordinarios de la humanidad. Desde las arenas de Giza hasta las ruinas de Éfeso, cada maravilla ofrece una ventana a un tiempo en el que el arte, la arquitectura y la ingeniería alcanzaron nuevas alturas.
La Riviera Albanesa, ubicada en la costa suroeste de Albania, es un destino emergente que está capturando la atención de viajeros de todo el mundo. Con su impresionante belleza natural, playas cristalinas, encantadores pueblos costeros y una rica historia cultural, esta región promete una experiencia inolvidable. En este artículo, exploraremos los lugares imprescindibles y los tesoros ocultos de la Riviera Albanesa.
Dhermi
Dhermi es una joya de la Riviera, conocida por sus playas de guijarros blancos y aguas turquesas. Este pequeño pueblo costero ofrece una combinación perfecta de belleza natural y tranquilidad. La Playa de Dhermi es ideal para nadar, hacer snorkel y tomar el sol. Además, las cercanas montañas Llogara proporcionan rutas de senderismo con vistas panorámicas al mar Jónico.
Ksamil
Ksamil, a menudo llamada el Caribe del Mediterráneo, cuenta con algunas de las playas más hermosas de Albania. Las pequeñas islas Ksamil, accesibles en bote, ofrecen una experiencia más privada y exclusiva. Este lugar es perfecto para nadar, practicar deportes acuáticos y disfrutar de la serenidad de sus paisajes. Los restaurantes locales sirven mariscos frescos y platos albaneses tradicionales.
Butrinto
El Parque Nacional de Butrinto es un sitio arqueológico de renombre mundial y Patrimonio de la Humanidad de la UNESCO. Este antiguo asentamiento, que data de la época griega, romana, bizantina y veneciana, ofrece una visión fascinante de la historia de la región. Entre sus atracciones destacan el teatro, el baptisterio, y las murallas del castillo. Un paseo por este parque te transportará a tiempos antiguos, rodeado de un entorno natural impresionante.
Blue Eye
El Blue Eye, o Syri i Kalter, es una fuente natural de increíble belleza situada en un entorno exuberante. Sus aguas de color azul intenso y cristalino parecen surgir de las profundidades de la tierra, creando un espectáculo visual único. Es un lugar ideal para hacer caminatas y disfrutar de la naturaleza en su estado más puro. No olvides tu cámara para capturar este fenómeno natural.
Gastronomía local
La cocina de la Riviera Albanesa es una deliciosa mezcla de influencias mediterráneas y balcánicas. Los mariscos frescos son la estrella del menú, preparados en una variedad de platos que deleitan el paladar. Entre los platos que debes probar están el «tavë kosi» (cordero con yogur) y el «byrek» (pastel salado). Los restaurantes locales también ofrecen una excelente selección de vinos albaneses y el tradicional «raki».
Dentro de la programación paralela al Festival de Cine de l’Alfàs está la ruta guiada al Faro de l’Albir, el próximo sábado 13 de julio a las 19.30 horas. Una actividad gratuita, aunque es preciso inscribirse previamente en semanacultural@lalfas.com Las plazas son limitadas
La oferta patrimonial de l’Alfàs del Pi se está convirtiendo en uno de sus grandes atractivos turísticos ,y el camino al faro, es una de las rutas del Parc Natural de Serra Gelada que más afluencia de público registra por su accesibilidad y por contar con el único faro cultural de toda la Comunidad Valenciana.
En octubre de 2011 el Ayuntamiento de l’Alfàs ponía en marcha en colaboración con el Parc Natural de la Serra Gelada el Centro de Interpretación Faro de l’Albir, convirtiéndose en el primer faro cultural de toda la Comunidad Valenciana, información recogida en una guía editada también recientemente en inglés, con detalles varios y de interés todos, además de muy fácil lectura, sobre diferentes aspectos, como la fecha, 30 de abril de 1863, en que se iluminó por primera vez la linterna de este edificio singular, o la curiosidad sobre la lampara, que en un principio se iluminaba con aceite de oliva, hasta que en 1984 se instalaron paneles de energía solar. El objetivo de entonces y ahora sigue siendo el mismo “preservar este importante elemento de nuestro patrimonio histórico, difundir los múltiples valores culturales y medioambientales de la Serra Gelada, y la necesidad de todos de implicarnos en su protección”.
Sendero Azul a la Ruta del Faro de l’Albir desde 2013 también
Gracias a la colaboración entre el Ayuntamiento de l’Alfàs del Pi, la conselleria de Medio Ambiente y el ente gestor del Parc Natural de la Serra Gelada, la ruta del faro es accesible para personas con movilidad reducida, en sillas de ruedas manuales o eléctricas. Se han pavimentadolos accesos a áreas de descanso y merenderos, para que cualquier usuario de silla de ruedas, o personas con movilidad reducida, puedan acceder a las mismas y, así, hacer pleno uso de esta emblemática ruta del Parc Natural. Los espacios de recreo son accesibles y los desniveles de terreno están correctamente señalizados, así como el acceso principal; el pavimento de todas las rutas y zonas de recreo es antideslizante, y los senderos de circulación tienen una anchura mínima de 1,50 metros para los peatones y las personas usuarias de sillas de ruedas.
El Museo de Bellas Artes de Valencia, también conocido como Museo de San Pío V, es uno de los más importantes de España y alberga una colección excepcional que abarca desde la Edad Media hasta el siglo XX. Situado en un edificio histórico en el centro de Valencia, el museo ofrece a sus visitantes una visión profunda de la evolución del arte occidental. En este ensayo turístico, exploraremos algunos de los cuadros más destacados de la colección, obras que reflejan la riqueza y diversidad del patrimonio artístico español.
«Autorretrato» de Diego Velázquez
Uno de los tesoros más valiosos del museo es el «Autorretrato» de Diego Velázquez. Este cuadro, que se cree que fue pintado en 1640, ofrece una visión introspectiva del gran maestro del Siglo de Oro español. Velázquez es conocido por su habilidad para capturar la esencia de sus sujetos con una precisión y profundidad psicológica incomparables. En este autorretrato, podemos ver la confianza y la introspección de un artista en la cima de su carrera. La técnica magistral de Velázquez, con su uso delicado de la luz y la sombra, hace de esta obra una joya imprescindible del museo.
«San Sebastián» de El Greco
El Greco, nacido Doménikos Theotokópoulos, es otro de los grandes nombres de la pintura española presentes en el museo. Su «San Sebastián», pintado alrededor de 1610, es una obra que destaca por su dramatismo y su expresividad. El uso del color y la luz en esta pintura crea una atmósfera casi mística, que es característica del estilo de El Greco. La figura alargada de San Sebastián, con su mirada hacia el cielo, transmite una sensación de éxtasis y sufrimiento que conmueve profundamente al espectador.
«El Tribunal de las Aguas» de Bernardo Ferrándiz
«El Tribunal de las Aguas» de Bernardo Ferrándiz es una obra maestra del realismo español del siglo XIX. Este cuadro, que retrata una escena del famoso Tribunal de las Aguas de Valencia, es notable por su detallada representación de los personajes y su entorno. Ferrándiz captura con gran precisión la arquitectura y la atmósfera del lugar, así como las expresiones y posturas de los miembros del tribunal. Esta obra no solo es un testimonio de la habilidad técnica del artista, sino también un documento histórico que nos transporta a la Valencia de su tiempo.
«La Virgen de la Leche» de Joan de Joanes
Joan de Joanes, uno de los pintores más destacados del Renacimiento español, está representado en el museo con varias obras importantes, entre las cuales destaca «La Virgen de la Leche». Pintado en el siglo XVI, este cuadro es un ejemplo sublime del arte devocional de la época. La serenidad y la ternura de la Virgen, así como la delicadeza con la que sostiene al Niño Jesús, son características que muestran la influencia del Renacimiento italiano en el trabajo de Joanes. La utilización del color y la composición equilibrada reflejan la maestría del artista.
«La Primavera» de Joaquín Sorolla
Joaquín Sorolla, uno de los pintores más celebrados de la historia del arte español, tiene una presencia destacada en el Museo de Bellas Artes de Valencia. Su obra «La Primavera» es un ejemplo deslumbrante de su habilidad para capturar la luz y el color. Pintado en 1900, este cuadro muestra a un grupo de niñas jugando en un jardín en plena floración. La alegría y la vivacidad de la escena, junto con la técnica impresionista de Sorolla, hacen de esta obra una de las más queridas del museo.
«El retrato de la Marquesa de San Joaquín» de Francisco de Goya
Francisco de Goya, uno de los gigantes del arte occidental, también está representado en el museo con varias obras notables. Entre ellas, destaca «El retrato de la Marquesa de San Joaquín». Este retrato, pintado en 1799, muestra la habilidad de Goya para capturar la personalidad y el estatus de sus sujetos. La elegancia y la sofisticación de la marquesa están plasmadas con gran detalle, y el uso del color y la luz resalta su figura con un realismo impresionante. La pintura también ofrece una visión de la moda y la cultura de la nobleza española de finales del siglo XVIII.
El Museo de Bellas Artes de Valencia es un destino imprescindible para los amantes del arte. Su colección abarca siglos de historia y ofrece una visión única de la evolución del arte en España. Desde los autorretratos introspectivos de Velázquez hasta las escenas llenas de luz de Sorolla, cada obra cuenta una historia y ofrece una ventana a diferentes épocas y estilos artísticos. Una visita a este museo no solo enriquece el conocimiento del visitante sobre el arte, sino que también ofrece una experiencia estética profunda y memorable.
La Falla del Moraig, situada en la costa mediterránea de España, es un destino turístico de notable interés geológico y natural. Localizada en la Cala del Moraig, en el municipio de Benitatxell, en la provincia de Alicante, esta maravilla natural ofrece a los visitantes una experiencia única donde la geología, el paisaje marino y la belleza escénica se entrelazan para crear un lugar de excepcional atractivo.
La Falla del Moraig es una estructura geológica impresionante que revela la historia tectónica de la región. Este accidente geológico es una fractura en la roca que muestra claramente el desplazamiento de los estratos a lo largo del tiempo. La zona es también conocida por sus aguas cristalinas y la variedad de actividades que se pueden realizar, desde el senderismo hasta el buceo.
La falla es un testimonio de la dinámica geológica que ha modelado la costa de la Marina Alta. La región está compuesta principalmente por formaciones de roca caliza que se remontan al período Mesozoico. La fractura visible en la Falla del Moraig muestra un desplazamiento significativo de estos estratos, lo que proporciona a los geólogos y entusiastas de la naturaleza una ventana única para observar y estudiar los procesos tectónicos que han dado forma a la región.
La falla misma es accesible a través de un sendero que lleva a los visitantes cerca de la estructura, permitiendo una observación detallada de las características geológicas. Este sendero es parte del atractivo turístico, ya que combina la caminata con la posibilidad de aprender sobre la historia geológica del área.
Además de su interés geológico, la Falla del Moraig y sus alrededores ofrecen una amplia gama de actividades recreativas. La Cala del Moraig es una playa aislada y pintoresca, famosa por sus aguas cristalinas y su entorno natural virgen. Es un lugar ideal para nadar, tomar el sol y disfrutar del mar Mediterráneo en su forma más pura.
Para los amantes del buceo, las aguas de la Cala del Moraig ofrecen una experiencia submarina espectacular. La claridad del agua y la diversidad de la vida marina hacen de este lugar un destino privilegiado para el buceo. Los buceadores pueden explorar las cuevas submarinas y las formaciones rocosas, así como observar una variedad de especies marinas en su hábitat natural.
El entorno que rodea la Falla del Moraig es igualmente atractivo para los excursionistas. Varias rutas de senderismo bien señalizadas permiten a los visitantes explorar el paisaje mediterráneo, con sus vistas panorámicas del mar y la costa. Uno de los senderos más populares es el que conduce al mirador de la Cala del Moraig, desde donde se pueden obtener vistas impresionantes de la costa y la falla.
Durante las caminatas, los visitantes pueden disfrutar de la flora y fauna típicas de la región, incluyendo especies endémicas de plantas y aves. El contraste entre el azul profundo del mar y el verde de la vegetación mediterránea crea un paisaje de gran belleza.
La Falla del Moraig y sus alrededores son áreas de gran valor natural y cultural, por lo que se han implementado diversas medidas de conservación para proteger este patrimonio. Las autoridades locales y diversas organizaciones trabajan conjuntamente para preservar la calidad del agua, la integridad de las formaciones geológicas y la biodiversidad del área.
Se fomenta un turismo sostenible y respetuoso con el medio ambiente, alentando a los visitantes a seguir prácticas responsables y a contribuir a la conservación del lugar. Esto incluye la adecuada disposición de residuos, el respeto a las señalizaciones y la limitación de actividades que puedan dañar el entorno natural.
La Falla del Moraig es un destino turístico que combina la fascinación geológica con la belleza natural del Mediterráneo. Ya sea explorando la estructura geológica, disfrutando de un día en la playa, buceando en sus aguas cristalinas o caminando por sus senderos, los visitantes encontrarán una experiencia rica y variada. La preservación de este tesoro natural es fundamental para asegurar que futuras generaciones puedan continuar disfrutando de la Falla del Moraig y su entorno único.
La actriz y humorista Coria Castillo será la encargada de conducir la Gala de Clausura del 36 Festival de Cine de l’Alfàs del Pi, que tendrá lugar el próximo sábado 13 de julio, a las 22 horas, en la Casa de Cultura. Gala en la que se nombrará embajador honorífico del Festival al escritor y periodista Máximo Huerta. Coria Castillo comienza en el teatro a los 13 años con el Colectivo El Tirso. En 2009 centra su carrera en la comedia, ganando varios concursos nacionales de monólogos y participando en Paramount Comedy y Comedy Central. En 2011 se une al Circo de los Horrores, girando tres años por España y México. Desde 2018 colabora con la compañía de teatro Yllana en shows de comedia e improvisación. En 2022 estrena como protagonista la serie te televisión ‘Fácil’, de Movistar Plus+, trabajo por el que recibe varios reconocimientos, entre los que destaca su nominación en los Premios Feroz 2023 como mejor intérprete femenina.
Cómica, monologuista y maestra de ceremonias en eventos, el sábado intentará arrancar más de una carcajada al público de l’Alfàs del Pi durante la Gala de Clausura del 36 Festival de Cine, que tendrá como grandes protagonistas a los ganadores del concurso de cortometrajes. Este es uno de los certámenes nacionales de cortometrajes que mayor cuantía en premios destina a su sección competitiva, con un total de 8.000 euros. El Festival concede un primer premio, dotado con 4.000 euros y Faro de Plata, un segundo premio de 2.000 euros y un tercer premio de 1.000 euros, además de un premio al Mejor Cortometraje Valenciano, que lleva aparejada una dotación económica de 500 euros.Por séptimo año, en colaboración con las asociaciones Huellas de Mujer y CIMA (Asociación de Mujeres Cineastas y de Medios Audiovisuales), el Festival concede un premio al mejor cortometraje con perspectiva de género, dotado de 500 euros, que se falla entre los cortos de la sección oficial.
También se otorgan premios al mejor actor, actriz, guión, dirección y fotografía. Así mismo, el ganador del certamen podrá concurrir a los Premios Goya, ya que el Festival ha sido seleccionado por la Academia de las Artes y las Ciencias Cinematográficas de España para hacer la preselección de candidatos. El jurado del Festival encargado de fallar los premios está compuesto por César Bardés, crítico cinematográfico; Lina Samboni, productora y realizadora audiovisual y representante de CIMA; Nacho G. Velilla, director de cine y guionista; Jorge Asín, actor, y Coria Castillo, actriz y cómica. Además, hay un jurado encargado de fallar el Premio al Mejor Corto Valenciano en el que se integran Juan Blanco, director; Eva Andújar, coordinadora de producción, y Laura Ponce, coordinadora de la ESCAC en Ciudad de la Luz.El Festival de Cine de l’Alfàs del Pi tiene como principal misión la promoción del cine realizado en España y, especialmente, de los cortometrajes españoles. En esta 36 edición, la organización ha recibido un total de 1.154 cortos, de los que 27 han sido seleccionados para competir en la Sección Oficial.
El concurso está abierto a la participación de productores y realizadores españoles de películas de ficción en formato digital, que no superen los 20 minutos de duración. Como en años anteriores, destaca la gran calidad de los cortometrajes, historias que sorprenden por la forma en que están contadas y de una gran variedad de géneros. Hay mucho drama social, además de comedia, terror, suspense, thriller…Los cortos que compiten por el Faro de Plata son: ‘Antes de que se poña o sol’, de Nani Matos; ‘Bebé’, de Allan J. Arcal; ‘Cuando las cigarras callen’, de Bea Hohenleiter; ‘Cuarentena’, de Celia de Molina; ‘El cacharrico’, de Óscar Toribio Carbayo; ‘El desayuno de los funcionarios’, de Javier Gómez Bello; ‘El Leyero’, de Alex Jiménez; ‘Escribiendo’, de Pablo Olewski; ‘Esto no es Noruega’, de Francisco Cavero Rubio y Alicia Albares Martínez; ‘Fairgame: 90 minutos con El Rifle’, de Caque Trueba y Juan Trueba; ‘Felicidades Hansel’, de Miguel Pertejo; ‘Heredarán la tierra’, de Borja Echeverría; ‘La cremallera’, de Martín Cuervo; ‘La gran obra’, de Àlex Lora; ‘La paz de los cementerios’, de Raquel Troyano; ‘Lechugas’, de Javi Armas; ‘Liberté’, de Martín D. Guevara; ‘Los horrores de la guerra’, de Manolo Orellana Naranjo; ‘Mi zona’, de Cristian Beteta; ‘Normas de higiene’, de Amaia San Sebastián Larzabal; ‘Pompita’, de Ana Graciani; ‘Regreso al armario’, de Gerald B. Fillmore; ‘Rutina’, de Roberto López Carneiro; ‘Sostén G3,7’, de Ruth y David García Díaz; ‘Tribu’, de Carlos Gómez-Trigo; ‘Tumbas vecinas’, de José Antonio Gutiérrez Bustos’, y ‘Y tú más’, de Ana Cayuela Muñoz y Leonor Jiménez Moreno. De este modo, el 36 Festival de Cine de l’Alfàs del Pi llega a su recta final. Se han proyectado cerca de 40 películas y más de medio centenar de cortos. Un año en el que se han organizado interesantes actividades paralelas, desde conciertos a exposiciones, cinefórums y encuentros de cine. Malena Alterio, Luis Zahera y Vladimir Cruz han sido los homenajeados del Festival en esta 36 edición con la entrega del Faro de Plata. El Festival de Cine de l’Alfàs del Pi se celebra hasta el 14 de julio. Durante sus más de tres décadas de vida ha logrado reunir en el municipio a reconocidos actores y actrices, directores, productores, técnicos y guionistas del panorama cinematográfico nacional.
Redacción (Madrid) Viajar en pareja es una de las experiencias más enriquecedoras y emocionantes que se pueden vivir. Compartir nuevas aventuras, explorar lugares desconocidos y crear recuerdos juntos fortalece los lazos y añade una chispa de romanticismo a la relación. Aquí te presentamos algunos destinos ideales para disfrutar en pareja, desde escapadas tranquilas hasta aventuras emocionantes.
París es, sin duda, uno de los destinos más románticos del mundo. Pasear por las orillas del Sena, disfrutar de una cena en un bistró acogedor y admirar la Torre Eiffel iluminada al anochecer son solo algunas de las actividades que hacen de París una opción perfecta para los enamorados. Además, pueden visitar museos como el Louvre o el Musée d’Orsay, y perderse en los encantadores barrios de Montmartre y Le Marais.
Las islas griegas son famosas por sus paisajes de ensueño, y Santorini es quizás la más espectacular de todas. Sus casas blancas con techos azules, sus impresionantes puestas de sol y sus playas de arena volcánica crean un ambiente idílico para una escapada romántica. Alquilar un quad para explorar la isla, disfrutar de un baño en las aguas termales y cenar con vistas a la caldera son experiencias que no pueden faltar.
Para quienes buscan una mezcla de cultura, historia y naturaleza, Kyoto es el destino perfecto. Este antiguo capital japonesa ofrece templos majestuosos, jardines zen y bosques de bambú que invitan a la reflexión y la serenidad. Un paseo por el distrito de Gion, conocido por sus geishas, o una visita al Fushimi Inari-taisha, con sus icónicos torii rojos, son momentos que quedarán grabados en la memoria.
La Costa Amalfitana, con sus acantilados dramáticos y coloridos pueblos, es un destino ideal para las parejas que desean combinar relax y aventura. Pueden conducir por la serpenteante carretera costera, visitar Positano y Amalfi, y disfrutar de la gastronomía italiana en restaurantes con vistas al mar. Además, una excursión a la isla de Capri añade un toque de lujo y exclusividad a la experiencia.
Bali es sinónimo de espiritualidad, belleza natural y lujo accesible. Las parejas pueden disfrutar de la tranquilidad de sus playas, explorar templos antiguos y participar en retiros de yoga. Ubud, el corazón cultural de Bali, ofrece arrozales impresionantes, mercados artesanales y una vibrante escena artística. Hospedarse en una villa privada con piscina infinita y vistas a la jungla es una experiencia inolvidable.
El Parque Nacional Marino Bunaken, ubicado en la provincia de Célebes Septentrional, Indonesia, es uno de los destinos más codiciados por los entusiastas del buceo y la biodiversidad marina. Este parque, que abarca una superficie de aproximadamente 890 km², es famoso por sus aguas cristalinas, arrecifes de coral vibrantes y una abundante vida marina, convirtiéndolo en un paraíso tanto para científicos marinos como para turistas aventureros.
El Parque Nacional Marino Bunaken fue establecido en 1991 como parte de los esfuerzos del gobierno indonesio por preservar sus ricos ecosistemas marinos y promover el ecoturismo. La zona incluye cinco islas principales: Bunaken, Manado Tua, Siladen, Montehage y Nain. Desde su creación, el parque ha jugado un papel crucial en la conservación de diversas especies marinas y en la educación ambiental de los visitantes y la comunidad local.
El parque alberga una extraordinaria variedad de vida marina. Los buzos y esnorquelistas pueden esperar encontrarse con más de 390 especies de corales y un sinfín de especies de peces, incluyendo el pez payaso, el pez ángel, el pez león y diversas especies de tiburones y rayas. Además, las aguas de Bunaken son hogar de criaturas más exóticas como tortugas marinas, delfines y ocasionalmente dugongos.
Los arrecifes de coral en Bunaken son famosos por su complejidad y colorido. El muro de coral que rodea la isla de Bunaken desciende abruptamente a más de 600 metros, ofreciendo un espectáculo impresionante para los buceadores. Este muro está cubierto de esponjas, anémonas y corales duros y blandos, proporcionando refugio y alimento a una multitud de especies marinas.
Las islas del parque están rodeadas por playas de arena blanca y aguas cristalinas. Las playas de Siladen y Bunaken son especialmente populares entre los visitantes que buscan relajarse y disfrutar del sol. Además, el parque ofrece paisajes volcánicos impresionantes, como el monte Manado Tua, un volcán extinto que añade un toque dramático al horizonte.
Bunaken es mundialmente conocido por sus sitios de buceo de clase mundial. Los operadores locales ofrecen tours guiados de buceo y esnórquel, proporcionando equipo y guías expertos. Los puntos de buceo populares incluyen Fukui Point, Lekuan Walls y Mandolin, cada uno ofreciendo una experiencia única con su propia variedad de vida marina y formaciones de coral.
Además de la vida marina, Bunaken es un excelente lugar para la observación de aves y otros animales. Las islas son hogar de diversas especies de aves, incluidos loros y aves del paraíso. Los tours en bote también pueden llevar a los visitantes a avistar delfines y, en ciertas épocas del año, ballenas.
La isla de Manado Tua ofrece oportunidades para el senderismo y la exploración. Los aventureros pueden escalar hasta la cima del volcán extinto, disfrutando de vistas panorámicas del parque y sus alrededores. Las caminatas también permiten a los visitantes experimentar la flora y fauna terrestres del parque.
El Parque Nacional Marino Bunaken no solo es un destino turístico, sino también un importante centro de conservación y educación. Los esfuerzos de conservación se centran en proteger los arrecifes de coral y la biodiversidad marina a través de la investigación científica, la educación comunitaria y el desarrollo sostenible del turismo. Los visitantes son alentados a participar en programas de voluntariado y actividades educativas para aprender más sobre la ecología marina y las prácticas de conservación.
El turismo en Bunaken ha tenido un impacto significativo en la economía local, proporcionando empleo y oportunidades comerciales para la comunidad. Los operadores turísticos, hoteles, restaurantes y tiendas de recuerdos han florecido gracias al flujo constante de visitantes. Sin embargo, también se enfrentan a desafíos como la necesidad de gestionar el turismo de manera sostenible para evitar daños ambientales y mantener la salud del ecosistema marino.
El Parque Nacional Marino Bunaken es un testimonio de la belleza y la biodiversidad de los océanos del mundo. Con su rica vida marina, impresionantes arrecifes de coral y paisajes volcánicos, Bunaken ofrece una experiencia inolvidable para los amantes de la naturaleza y el mar. Al mismo tiempo, sirve como un recordatorio de la importancia de la conservación y el turismo sostenible, asegurando que este paraíso marino permanezca intacto para las generaciones futuras. Una visita a Bunaken no solo es una aventura, sino también una oportunidad para conectarse con la naturaleza y contribuir a su preservación.