Redacción (Madrid)

El suroeste de los Estados Unidos es un vasto territorio lleno de maravillas naturales, desde majestuosos cañones hasta desiertos interminables. En medio de este panorama árido y misterioso se encuentra una de las joyas menos conocidas pero más impactantes de Nuevo México: las Bisti/De-Na-Zin Wilderness, también conocidas como Bisti Badlands. Este entorno surrealista, ubicado en el desierto de San Juan, es una tierra de formaciones rocosas inusuales, paisajes extraterrestres y colores vibrantes que parecen sacados de otro mundo. En este ensayo, exploraremos las razones por las que este destino debe estar en la lista de cualquier amante de la naturaleza, el senderismo y la fotografía.

Bisti Badlands es un área protegida que cubre aproximadamente 18,000 acres de terreno desértico, conocida por sus impresionantes formaciones rocosas y sus paisajes erosionados. Lo que hace único a este lugar es la diversidad de formaciones geológicas, que incluyen hoodoos (columnas de roca de formas caprichosas), mesetas, valles de huesos de dinosaurios fosilizados y capas multicolores de arcilla y arenisca.

Caminar por Bisti es como explorar el set de una película de ciencia ficción. Los colores rojizos, naranjas y amarillos de las colinas contrastan con las formaciones grises y negras de roca volcánica. Este juego de colores, además de las formas peculiares de las rocas erosionadas, como los huevos petrificados y las chimeneas de hadas, hacen que la experiencia sea inolvidable. No es de extrañar que muchos fotógrafos acudan aquí para capturar imágenes únicas del paisaje.

A diferencia de parques nacionales como el Gran Cañón o Zion, que atraen a miles de turistas diariamente, Bisti Badlands sigue siendo un destino relativamente desconocido y, por lo tanto, ofrece una experiencia mucho más íntima y solitaria. Este aislamiento es uno de sus mayores atractivos. No hay caminos pavimentados ni servicios turísticos cerca, lo que obliga a los visitantes a estar bien preparados y a llevar todo lo que necesitan para su excursión. Este carácter remoto también significa que, a menudo, puedes pasar horas sin cruzarte con otra persona, lo que permite una profunda conexión con el entorno.

Sin embargo, esta soledad no está exenta de desafíos. Bisti Badlands no cuenta con senderos señalizados ni servicios de emergencia cercanos, lo que exige una planificación adecuada para garantizar una experiencia segura. Los excursionistas deben llevar consigo abundante agua, GPS y un mapa detallado, ya que es fácil perderse en el laberinto de rocas y colinas. Sin embargo, para los aventureros dispuestos a aceptar este reto, la recompensa es un paraje casi intacto por la intervención humana.

La región de Bisti/De-Na-Zin Wilderness también tiene una rica historia geológica y paleontológica. Hace más de 70 millones de años, esta zona era un pantano costero habitado por dinosaurios y otras criaturas prehistóricas. Los restos fosilizados de estos animales se pueden encontrar dispersos por el área, especialmente huesos y restos de plantas fosilizadas. Para los aficionados a la paleontología, Bisti ofrece una oportunidad única para retroceder en el tiempo y contemplar los vestigios de un mundo perdido.

Además de su importancia geológica, Bisti Badlands también tiene un valor cultural significativo. El nombre «De-Na-Zin» proviene del idioma navajo y se refiere a las grullas que habitan la región. Las tierras cercanas están vinculadas a la historia y cultura de los pueblos nativos americanos, lo que añade una capa de profundidad a la experiencia de visitar este destino.

La fotografía en Bisti Badlands es una de las principales razones por las que los visitantes acuden a este destino remoto. Los paisajes extraños y coloridos, junto con la variación de luz a lo largo del día, crean oportunidades únicas para capturar imágenes surrealistas. Al amanecer y al atardecer, los tonos del cielo se mezclan con los colores del terreno, ofreciendo un espectáculo visual que atrae tanto a fotógrafos profesionales como a aficionados. Los hoodoos y otras formaciones rocosas parecen cobrar vida con las sombras que proyecta el sol bajo.

Es importante tener en cuenta que, debido a la falta de señalización o caminos establecidos, los fotógrafos deben estar dispuestos a explorar y buscar los mejores ángulos y vistas por su cuenta, lo que añade un sentido de descubrimiento y aventura a la experiencia.

Bisti Badlands es un destino que desafía las expectativas de lo que puede ser un desierto. Su naturaleza remota, combinada con paisajes únicos y formaciones rocosas impresionantes, hacen que sea un lugar ineludible para aquellos que buscan alejarse de las multitudes y sumergirse en un mundo que parece de otro planeta. Es un lugar que invita a la reflexión, la exploración y el asombro. Aunque presenta desafíos logísticos y físicos, la experiencia de caminar por este laberinto geológico, sin duda, dejará una impresión duradera en cualquier visitante. Para los que buscan algo más que el turismo convencional, Bisti Badlands es una joya oculta que merece ser descubierta.

Recommended Posts