Redacción (Madrid)
Róterdam, la segunda ciudad más grande de los Países Bajos, es famosa por su arquitectura vanguardista, su vibrante puerto y su energía cosmopolita. Esta ciudad, casi completamente reconstruida después de la Segunda Guerra Mundial, se ha convertido en un referente de la innovación arquitectónica y el diseño moderno. Si solo tienes 24 horas en Róterdam, aquí tienes un itinerario para disfrutar de lo mejor de esta ciudad dinámica y creativa.
Comienza tu día en la impresionante Estación Central de Róterdam, conocida por su diseño moderno con una gran estructura en forma de pico metálico. Aquí encontrarás varios cafés donde puedes desayunar como un local: un café y un «broodje» (panecillo) o una deliciosa pastelería holandesa te darán la energía necesaria para explorar la ciudad.
Desde la estación, camina hacia el Markthal, uno de los iconos arquitectónicos de Róterdam. Este mercado cubierto tiene forma de arco gigante y su interior está decorado con una colorida obra de arte en el techo llamada Horn of Plenty (Cuerno de la Abundancia), que representa frutas, flores y animales en tamaño gigante. Dentro del Markthal encontrarás puestos de comida local e internacional. Es el lugar ideal para degustar delicias holandesas, como los quesos gouda y los stroopwafels (galletas de caramelo).
A solo unos minutos caminando del Markthal, encontrarás otra de las atracciones más conocidas de la ciudad: las Casas Cubo (Kubuswoningen). Diseñadas por el arquitecto Piet Blom, estas viviendas tienen forma de cubo inclinado, un ejemplo único de arquitectura experimental. Puedes visitar el Museo de la Casa Cubo para ver el interior de una de ellas y entender cómo se adaptan sus espacios para ser habitables.
Para disfrutar de unas vistas icónicas de Róterdam, almuerza en uno de los restaurantes cercanos al Puente de Erasmo (Erasmusbrug), conocido como «El Cisne» por su diseño elegante. Hotel New York y Loetje aan de Maas son excelentes opciones para disfrutar de comida local y vistas al río Mosa.
Después del almuerzo, dedica un par de horas al arte en uno de los principales museos de la ciudad. Si te gusta el arte clásico y moderno, el Museo Boijmans Van Beuningen alberga una colección impresionante que incluye desde los grandes maestros holandeses como Rembrandt hasta piezas de Dalí y Van Gogh. Si prefieres una experiencia más ecléctica y contemporánea, el Kunsthal tiene exposiciones temporales de arte moderno, fotografía y diseño.
Por la noche, explora Witte de Withstraat, una de las calles más vibrantes de Róterdam. Conocida por su ambiente bohemio, está repleta de bares, galerías de arte y restaurantes. Bazar, un restaurante de cocina internacional con inspiración en el Medio Oriente, es una opción popular por su decoración colorida y sus sabores variados. O, si prefieres cocina holandesa moderna, De Ballentent es una excelente opción en la zona.
Después de cenar, aprovecha para disfrutar de la vida nocturna de Róterdam. Algunos bares destacados son WORM, un centro cultural alternativo con música en vivo y eventos de arte, y BIRD, un bar y club de jazz que también ofrece DJ sets. Para una experiencia moderna, Suicide Club, en lo alto de un rascacielos, ofrece una terraza con vistas espectaculares y un ambiente sofisticado.