Redacción (Madrid)
Rusia, el país más grande del mundo, se extiende por Europa del Este y el norte de Asia, abarcando once husos horarios y una diversidad geográfica y cultural sin igual. Su rica historia, sus paisajes impresionantes y su influencia en la política global hacen de Rusia un país fascinante y complejo.
La vastedad de Rusia se refleja en su diversidad geográfica. Desde las tundras heladas de Siberia hasta las fértiles tierras agrícolas del suroeste, pasando por montañas, lagos y ríos majestuosos, el paisaje ruso es variado y espectacular. El Volga, el río más largo de Europa, y el Baikal, el lago más profundo del mundo, son solo dos ejemplos de las maravillas naturales del país.
El clima varía enormemente, desde los fríos polares en el norte hasta los climas más templados del sur. Las duras condiciones climáticas han influido en la vida cotidiana y en la resiliencia del pueblo ruso.
La cultura rusa es rica y diversa, con una herencia que abarca la literatura, la música, el arte, el ballet y el cine. Escritores como Tolstói, Dostoyevski y Pushkin han dejado un legado literario incomparable. En la música, compositores como Tchaikovsky y Rachmaninoff han tenido un impacto duradero en la música clásica mundial.
El ballet ruso, con compañías de renombre como el Ballet Bolshói y el Ballet Mariinski, es famoso en todo el mundo. Las artes visuales, representadas por pintores como Kandinsky y Chagall, han influido significativamente en movimientos artísticos globales.
En el escenario internacional, Rusia juega un papel crucial. Como miembro permanente del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas, tiene una influencia significativa en los asuntos globales. Sus relaciones con otros países, especialmente con Estados Unidos y la Unión Europea, son complejas y a menudo tensas, marcadas por desacuerdos sobre cuestiones de seguridad, derechos humanos y soberanía nacional.
Rusia también mantiene una relación estrecha con China y otros países de Asia, buscando equilibrar su influencia frente a las potencias occidentales. Su participación en conflictos regionales, como en Siria y Ucrania, y su papel en la Organización del Tratado de Seguridad Colectiva (OTSC) y la Unión Económica Euroasiática subrayan su interés en mantener una presencia estratégica en su vecindario inmediato y más allá.