La ciudad de las flores, un paraíso del comercio y gastronomía cantonesa de China, Guangzhou

Redacción (Madrid)

Guangzhou, una de las ciudades más antiguas y dinámicas de China, combina la modernidad con la rica historia y tradiciones milenarias del país. Ubicada en la provincia de Guangdong, en el sur de China, Guangzhou es conocida como la «Ciudad de las Flores» y el «Centro Comercial del Sur,» debido a su clima templado, su vibrante escena comercial y su tradición como centro de comercio e intercambio cultural. Esta metrópolis ofrece a sus visitantes una diversidad de atractivos que van desde imponentes rascacielos hasta templos ancestrales, mercados locales y exquisitos platillos de la cocina cantonesa. Guangzhou representa, para quienes la visitan, la experiencia de explorar una China vibrante, moderna y, a la vez, profundamente enraizada en su pasado.

Guangzhou, antiguamente conocida como Cantón, ha sido un centro importante de comercio desde hace más de dos mil años. Fue uno de los primeros puertos de China en abrir sus puertas al comercio exterior, y este contacto temprano con otras culturas ha dejado una huella en su arquitectura, su gastronomía y su diversidad étnica. Uno de los destinos históricos más emblemáticos es el Templo de los Seis Banyan, construido hace más de 1,400 años. Este templo budista, con su característica torre pagoda, representa un oasis de paz en el centro de la ciudad y es testimonio de la riqueza espiritual y cultural de Guangzhou.

El Museo de la Dinastía Nanyue, que alberga el mausoleo del rey de la antigua dinastía Nanyue, ofrece una fascinante mirada a la historia de Guangzhou y de la región. Aquí se encuentran tesoros y artefactos de más de 2,000 años, muchos de los cuales revelan los profundos vínculos comerciales que esta ciudad mantuvo con otras culturas de Asia. La Isla Shamian, otro destino histórico, conserva la arquitectura colonial europea de la época en que fue un importante centro de comercio occidental, y actualmente es un pintoresco barrio con cafés, galerías y tiendas.

Si bien Guangzhou tiene una rica historia, también destaca por ser una ciudad moderna y en constante desarrollo. La Torre de Cantón, uno de los edificios más altos de China, es símbolo de esta modernidad. Con sus más de 600 metros de altura, ofrece una vista panorámica impresionante de la ciudad y del río Perla, especialmente por la noche, cuando se ilumina con colores vibrantes. La torre también cuenta con restaurantes, áreas de entretenimiento y una noria en la cima, la cual es la más alta del mundo, brindando una experiencia emocionante para quienes se animen a contemplar Guangzhou desde las alturas.

El distrito financiero de Zhujiang New Town es otro de los puntos destacados de la modernidad de la ciudad. Este distrito alberga rascacielos de diseño innovador, centros comerciales de lujo y el icónico Ópera de Guangzhou, diseñado por la arquitecta Zaha Hadid. En Zhujiang, se concentra la escena empresarial y de alta tecnología de Guangzhou, lo que lo convierte en un lugar de interés para los amantes de la arquitectura contemporánea y quienes desean conocer el auge financiero y tecnológico de China.

La cocina cantonesa, famosa por su diversidad y riqueza de sabores, es uno de los mayores atractivos de Guangzhou. La ciudad es considerada la cuna del Dim Sum, una tradición culinaria que consiste en pequeñas porciones de platillos variados, servidos en cestas de bambú, y acompañados de té. Desde los tradicionales dumplings de camarón hasta el bao relleno de carne y las empanadas de barbacoa, el dim sum es una experiencia imperdible para quienes visitan la ciudad.

Además, Guangzhou es famosa por su comida callejera, que se puede encontrar en mercados como el Mercado Qingping. En estos espacios, los visitantes pueden probar delicias locales como fideos de arroz con ternera, sopa de fideos wonton, mariscos frescos y una variedad de frutas tropicales que crecen en la región. La gastronomía de Guangzhou refleja la frescura y calidad de sus ingredientes, así como su conexión con el comercio y el intercambio cultural a lo largo de los siglos.

Guangzhou tiene una vida nocturna vibrante y variada. Desde bares de lujo en el distrito financiero hasta mercados nocturnos y espectáculos tradicionales, la ciudad ofrece algo para todos los gustos. El Pearl River Night Cruise es una de las actividades nocturnas más populares, que permite a los turistas disfrutar de un recorrido en barco a lo largo del río Perla, observando la ciudad iluminada con sus rascacielos y puentes. Este crucero brinda una perspectiva única de la ciudad y es una de las mejores maneras de apreciar la belleza de Guangzhou por la noche.

Para aquellos interesados en el arte y la cultura, el Centro Cultural de Guangzhou y el Museo de Arte de Guangdong ofrecen exposiciones de arte contemporáneo y tradicional chino, así como eventos de danza, música y teatro. Además, el Festival Internacional de la Linterna, que se celebra anualmente en el parque Yuexiu, ilumina la ciudad con miles de faroles coloridos y presenta espectáculos culturales que muestran la diversidad étnica de la región.

A pesar de ser una ciudad moderna, Guangzhou conserva amplias áreas verdes donde los visitantes pueden relajarse y conectarse con la naturaleza. El Parque Yuexiu, uno de los más grandes de la ciudad, es un destino ideal para hacer caminatas, con hermosos jardines, lagos y la emblemática estatua de los Cinco Carneros, símbolo de la ciudad. Otro sitio popular es la Montaña Baiyun, que ofrece senderos naturales y vistas panorámicas desde su cima, ideal para quienes buscan un momento de tranquilidad fuera del bullicio urbano.

En el Parque de Chimelong, ubicado en las afueras de Guangzhou, se encuentran tanto un parque temático como un zoológico, uno de los más grandes de Asia, con una gran variedad de animales exóticos y atracciones familiares, lo cual lo convierte en un destino popular para quienes viajan con niños.

Guangzhou es una ciudad que sabe combinar su rica historia con la modernidad, la cultura tradicional con la vida urbana y el sabor de sus platos con la calidez de su gente. Con su mezcla única de historia, tecnología, gastronomía y naturaleza, Guangzhou ofrece una experiencia completa para los turistas que buscan descubrir una China multifacética. La ciudad invita a recorrer sus templos antiguos, admirar sus imponentes rascacielos, probar los auténticos sabores cantoneses y disfrutar de su vibrante vida nocturna. En definitiva, Guangzhou es un destino turístico único en China y un reflejo fascinante de la evolución y riqueza cultural del sur del país.

Shanghái: Donde el Pasado se Entrelaza con el Futuro

Redacción (Madrid)

Ubicada a orillas del río Yangtsé, Shanghái emerge como un faro de modernidad que ilumina el horizonte de China. Esta metrópoli, con sus relucientes rascacielos y su rica historia, es un testimonio vibrante de la fusión entre la tradición y la innovación.

Shanghái, con sus raíces que se remontan a la Dinastía Song, ha florecido de manera excepcional a lo largo de los siglos. El Bund, un paseo a lo largo del río adornado con edificios coloniales europeos, nos transporta a la Shanghái de principios del siglo XX, cuando la ciudad era un crisol de influencias culturales. La arquitectura clásica china se mezcla con la huella dejada por colonizadores británicos y franceses, creando un paisaje urbano único.

En contraste, el distrito financiero de Pudong es una maravilla moderna que define el perfil de Shanghái. Con icónicos rascacielos como la Perla de Oriente y la Torre Jin Mao, esta área reluce con la audacia del siglo XXI. Los rascacielos iluminados reflejan un presente económico dinámico y un futuro que se construye con ambición.

Los callejones de Shikumen en el área de Xintiandi ofrecen una visión auténtica de la vida tradicional shanghainesa. Estos antiguos patios convertidos en boutiques y restaurantes capturan la esencia de la cultura local. Mientras tanto, el Jardín Yuyuan, un oasis en medio del bullicio urbano, nos transporta a la serenidad de la antigua China con sus puentes de arco y paisajes verdes.

La gastronomía de Shanghái es un deleite para los sentidos. Los mercados callejeros ofrecen delicias locales, desde la sopa xiaolongbao hasta platos de mariscos frescos. Xintiandi, con sus elegantes restaurantes, invita a explorar la moderna escena culinaria china.

Shanghái es también hogar de la Exposición Mundial de 2010, un evento que consolidó su estatus como ciudad global. El tren de alta velocidad Maglev, que conecta el aeropuerto con el centro de la ciudad, es un símbolo tangible de la ambición tecnológica de Shanghái.

En conclusión, Shanghái no es simplemente una ciudad, es un testamento viviente de la capacidad humana para adaptarse y evolucionar sin perder su esencia. Shanghái, donde las luces de neón se entrelazan con los tejados de los templos, ofrece un viaje que transcurre entre la nostalgia y la innovación, demostrando que la belleza de esta ciudad reside en su capacidad para abrazar el cambio mientras abraza su historia.

Explorando Macao un encuentro entre culturas y elegancia, la ciudad del futuro

Redacción (Madrid)

Macao, la «Perla del Oriente», es un destino que fusiona con gracia la rica herencia cultural china con la influencia colonial portuguesa. Este pequeño enclave, conocido por sus brillantes luces y opulentos casinos, es mucho más que una meca del juego; es un lugar donde la historia, la arquitectura y la gastronomía se entrelazan de manera única.

Uno de los tesoros más destacados de Macao es su casco antiguo, un laberinto de calles empedradas y coloridos edificios coloniales portugueses. La arquitectura de la iglesia de San Pablo, aunque en ruinas, sigue siendo impresionante, y sus escalinatas ofrecen vistas panorámicas que transportan a los visitantes a épocas pasadas.

La mezcla de la arquitectura colonial y los templos chinos crea una sinfonía visual única. Lugares como el Templo A-Ma, venerado tanto por budistas como por taoístas, encarnan la coexistencia armoniosa de diversas creencias en Macao.

La Cotai Strip, con sus deslumbrantes hoteles y casinos, es el epítome de la opulencia moderna. La arquitectura futurista y las instalaciones de clase mundial como el Venetian Macao atraen a visitantes de todo el mundo, convirtiendo a Macao en un destino de lujo y entretenimiento.

La influencia portuguesa se manifiesta también en la deliciosa gastronomía de Macao. Desde las tascas portuguesas que sirven bacalao y vino hasta los puestos callejeros que ofrecen la famosa tarta de huevo, la diversidad culinaria es un festín para el paladar.

Macao no solo es un lugar de contrastes arquitectónicos y culinarios, sino que también alberga eventos culturales vibrantes. El Festival de las Artes de Macao y el Festival Internacional de Fuegos Artificiales son solo dos ejemplos de la rica vida cultural que la ciudad ofrece.

En resumen, Macao es un crisol de culturas que ha logrado preservar y celebrar su historia mientras abraza el futuro con elegancia y estilo. Desde la arquitectura única hasta la mezcla culinaria y la emocionante escena del entretenimiento, Macao invita a los visitantes a un viaje cautivador donde la tradición y la modernidad convergen en una experiencia única.