El Mount Bromo, el cráter activo en el corazón del Bromo Tengger Semeru

Redacción (Madrid)

Mount Bromo, uno de los volcanes más icónicos de Indonesia, se alza majestuoso en el Parque Nacional Bromo Tengger Semeru, en la isla de Java Oriental. Conocido por su espectacular paisaje lunar, amaneceres impresionantes y un constante velo de humo que emana de su cráter activo, Mount Bromo se ha convertido en un destino de ensueño para los amantes de la naturaleza, fotógrafos y viajeros aventureros. Su belleza surrealista, combinada con la rica cultura del pueblo Tengger, hace de este volcán un lugar único que ofrece una experiencia turística inolvidable.

Mount Bromo, con una altura de 2,329 metros, no es el volcán más alto de Indonesia, pero su atractivo radica en su dramática ubicación y su constante actividad. El volcán se encuentra en medio de una vasta llanura de ceniza volcánica conocida como la “Mar de Arena”, un paisaje que parece sacado de otro planeta. Esta llanura, formada por erupciones a lo largo de miles de años, está rodeada por montañas y colinas que crean un anfiteatro natural, donde el sol y la niebla juegan cada mañana para ofrecer un espectáculo de luces y sombras incomparable.

La vista más impresionante de Mount Bromo se obtiene desde el cercano Monte Penanjakan, un mirador popular que se encuentra a 2,770 metros sobre el nivel del mar. Desde aquí, los visitantes pueden observar el amanecer sobre el volcán, con el sol emergiendo detrás del imponente Monte Semeru, el volcán más alto de Java, que también se encuentra en constante erupción, añadiendo un toque dinámico y casi sobrenatural al paisaje.

La principal razón por la que los turistas visitan Mount Bromo es para presenciar el amanecer, un espectáculo natural que ha sido descrito como uno de los más bellos del mundo. Para vivir esta experiencia, es común salir de madrugada y realizar una travesía en jeep a través de la Mar de Arena para llegar al mirador del Monte Penanjakan. A medida que el cielo comienza a aclararse, los primeros rayos de sol pintan el cielo con tonos de naranja, rosa y púrpura, iluminando lentamente los contornos de Mount Bromo, Mount Batok y el Monte Semeru al fondo.

El contraste entre el humo blanco del cráter de Bromo, las laderas verdes de Batok y la neblina que cubre la Mar de Arena crea una escena tan espectacular que deja sin aliento a quienes la contemplan. Es un momento de asombro y conexión con la naturaleza que convierte cualquier esfuerzo en un recuerdo imborrable.

Después de admirar el amanecer, muchos visitantes descienden hacia la base de Mount Bromo para explorar el volcán de cerca. La caminata hacia el cráter es una experiencia en sí misma; un sendero polvoriento atraviesa la Mar de Arena, rodeado por un paisaje desolado que recuerda a la superficie lunar. A medida que se avanza, se percibe un fuerte olor a azufre y se escucha el retumbar del volcán, recordando a los viajeros que este gigante está muy vivo.

La ascensión final al cráter de Mount Bromo se realiza por una escalera de unos 250 escalones, que lleva directamente al borde del cráter. Desde allí, se puede observar de cerca la caldera humeante y sentir la vibración del suelo bajo los pies, mientras el volcán emite un rugido constante. La vista desde el borde es sobrecogedora, una mezcla de temor y admiración que captura la esencia de estar al borde de una de las fuerzas más poderosas de la naturaleza.

Mount Bromo no solo es un espectáculo natural, sino también un lugar sagrado para los Tengger, un grupo étnico que ha habitado esta región durante siglos. Según la leyenda, el volcán lleva el nombre de Brahma, el dios hindú de la creación, y es considerado como la morada de los dioses. Cada año, durante el festival de Yadnya Kasada, los Tengger suben al cráter de Bromo para realizar ofrendas que incluyen frutas, flores y ganado, arrojándolos al interior del volcán como muestra de gratitud y respeto a los dioses.

Esta tradición, que combina creencias hindúes y animistas, es un recordatorio de la estrecha relación que los Tengger tienen con su entorno natural y su veneración hacia Mount Bromo. Durante el festival, los visitantes pueden presenciar los rituales, disfrutar de las danzas tradicionales y sumergirse en una cultura que ha permanecido casi intacta a lo largo de los siglos.

La forma más común de llegar a Mount Bromo es a través de la ciudad de Probolinggo, desde donde parten tours y transportes hacia el Parque Nacional Bromo Tengger Semeru. Los visitantes suelen alojarse en los pueblos cercanos de Cemoro Lawang o Ngadisari, que ofrecen una variedad de opciones de hospedaje, desde sencillos hostales hasta acogedores hoteles con vistas al volcán.

Para visitar Mount Bromo, se recomienda llevar ropa de abrigo, ya que las temperaturas en la madrugada pueden ser bastante frías. Además, es esencial contar con calzado adecuado para caminar sobre terrenos volcánicos y, si es posible, una máscara para protegerse del polvo y los gases sulfurosos cerca del cráter. Los amaneceres y las vistas son más espectaculares durante la estación seca, que va de mayo a octubre, aunque el volcán puede visitarse durante todo el año.

Mount Bromo es mucho más que un simple volcán; es una experiencia sensorial que combina la majestuosidad de la naturaleza, la espiritualidad de las tradiciones locales y la emoción de estar frente a una fuerza volcánica en constante actividad. Sus amaneceres impresionantes, su cráter humeante y la mística Mar de Arena hacen de este lugar uno de los destinos más fascinantes de Indonesia.

Para los viajeros que buscan una conexión auténtica con la naturaleza y la cultura, Mount Bromo ofrece una ventana a un mundo donde el tiempo parece haberse detenido, permitiendo sentir la presencia de la tierra viva y la profunda espiritualidad que rodea a este icónico volcán. Visitar Mount Bromo es dejarse llevar por el encanto de lo inesperado y descubrir que, en cada amanecer, la tierra puede contar una historia nueva y cautivadora.

Un paraíso bajo el agua, sumérgete en las cristalinas aguas del Parque Nacional Marino de Bunakem

Redacción (Madrid)

El Parque Nacional Marino Bunaken, ubicado en la provincia de Célebes Septentrional, Indonesia, es uno de los destinos más codiciados por los entusiastas del buceo y la biodiversidad marina. Este parque, que abarca una superficie de aproximadamente 890 km², es famoso por sus aguas cristalinas, arrecifes de coral vibrantes y una abundante vida marina, convirtiéndolo en un paraíso tanto para científicos marinos como para turistas aventureros.

El Parque Nacional Marino Bunaken fue establecido en 1991 como parte de los esfuerzos del gobierno indonesio por preservar sus ricos ecosistemas marinos y promover el ecoturismo. La zona incluye cinco islas principales: Bunaken, Manado Tua, Siladen, Montehage y Nain. Desde su creación, el parque ha jugado un papel crucial en la conservación de diversas especies marinas y en la educación ambiental de los visitantes y la comunidad local.

El parque alberga una extraordinaria variedad de vida marina. Los buzos y esnorquelistas pueden esperar encontrarse con más de 390 especies de corales y un sinfín de especies de peces, incluyendo el pez payaso, el pez ángel, el pez león y diversas especies de tiburones y rayas. Además, las aguas de Bunaken son hogar de criaturas más exóticas como tortugas marinas, delfines y ocasionalmente dugongos.

Los arrecifes de coral en Bunaken son famosos por su complejidad y colorido. El muro de coral que rodea la isla de Bunaken desciende abruptamente a más de 600 metros, ofreciendo un espectáculo impresionante para los buceadores. Este muro está cubierto de esponjas, anémonas y corales duros y blandos, proporcionando refugio y alimento a una multitud de especies marinas.

Las islas del parque están rodeadas por playas de arena blanca y aguas cristalinas. Las playas de Siladen y Bunaken son especialmente populares entre los visitantes que buscan relajarse y disfrutar del sol. Además, el parque ofrece paisajes volcánicos impresionantes, como el monte Manado Tua, un volcán extinto que añade un toque dramático al horizonte.

Bunaken es mundialmente conocido por sus sitios de buceo de clase mundial. Los operadores locales ofrecen tours guiados de buceo y esnórquel, proporcionando equipo y guías expertos. Los puntos de buceo populares incluyen Fukui Point, Lekuan Walls y Mandolin, cada uno ofreciendo una experiencia única con su propia variedad de vida marina y formaciones de coral.

Además de la vida marina, Bunaken es un excelente lugar para la observación de aves y otros animales. Las islas son hogar de diversas especies de aves, incluidos loros y aves del paraíso. Los tours en bote también pueden llevar a los visitantes a avistar delfines y, en ciertas épocas del año, ballenas.

La isla de Manado Tua ofrece oportunidades para el senderismo y la exploración. Los aventureros pueden escalar hasta la cima del volcán extinto, disfrutando de vistas panorámicas del parque y sus alrededores. Las caminatas también permiten a los visitantes experimentar la flora y fauna terrestres del parque.

El Parque Nacional Marino Bunaken no solo es un destino turístico, sino también un importante centro de conservación y educación. Los esfuerzos de conservación se centran en proteger los arrecifes de coral y la biodiversidad marina a través de la investigación científica, la educación comunitaria y el desarrollo sostenible del turismo. Los visitantes son alentados a participar en programas de voluntariado y actividades educativas para aprender más sobre la ecología marina y las prácticas de conservación.

El turismo en Bunaken ha tenido un impacto significativo en la economía local, proporcionando empleo y oportunidades comerciales para la comunidad. Los operadores turísticos, hoteles, restaurantes y tiendas de recuerdos han florecido gracias al flujo constante de visitantes. Sin embargo, también se enfrentan a desafíos como la necesidad de gestionar el turismo de manera sostenible para evitar daños ambientales y mantener la salud del ecosistema marino.

El Parque Nacional Marino Bunaken es un testimonio de la belleza y la biodiversidad de los océanos del mundo. Con su rica vida marina, impresionantes arrecifes de coral y paisajes volcánicos, Bunaken ofrece una experiencia inolvidable para los amantes de la naturaleza y el mar. Al mismo tiempo, sirve como un recordatorio de la importancia de la conservación y el turismo sostenible, asegurando que este paraíso marino permanezca intacto para las generaciones futuras. Una visita a Bunaken no solo es una aventura, sino también una oportunidad para conectarse con la naturaleza y contribuir a su preservación.

El espíritu artístico y religioso del corazón de Java, adéntrate en la misteriosa Yogyakarta

Redacción (Madrid)

Ubicada en la isla de Java, Yogyakarta es una de las ciudades más vibrantes y culturalmente ricas de Indonesia. Conocida por su profunda herencia histórica, artística y espiritual, esta ciudad es un destino turístico imperdible. A lo largo de este ensayo, exploraremos los aspectos más destacados de Yogyakarta, desde sus monumentos antiguos y vibrantes tradiciones hasta sus atracciones naturales y vida urbana dinámica.

Yogyakarta, a menudo abreviada como Jogja, es el corazón cultural de Java. La ciudad ha sido un centro de civilización desde tiempos antiguos, y su importancia histórica es evidente en su palacio del sultán, el Kraton, que sigue siendo la residencia del sultán de Yogyakarta. Este palacio es una maravilla arquitectónica y cultural, donde los visitantes pueden aprender sobre la historia de la realeza javanesa y disfrutar de espectáculos tradicionales de danza y música gamelan.

Además, Yogyakarta es famosa por sus antiguos templos, especialmente los templos de Borobudur y Prambanan. Borobudur, el templo budista más grande del mundo, es una estructura imponente con su diseño de mandala y numerosas estupas que albergan estatuas de Buda. Prambanan, por otro lado, es un complejo de templos hindúes dedicado a la Trimurti: Brahma, Vishnu y Shiva. Ambos templos están inscritos como Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO y atraen a millones de visitantes cada año.

La ciudad es un hervidero de creatividad y arte. Yogyakarta es el hogar del batik, una técnica tradicional de teñido de telas que ha sido reconocida por la UNESCO como Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad. Los talleres de batik en la ciudad ofrecen a los visitantes la oportunidad de aprender y practicar esta antigua forma de arte.

El arte escénico también florece en Yogyakarta. El teatro de sombras wayang kulit, una forma tradicional de marionetas de sombra, es una experiencia cultural fascinante que narra historias épicas de la mitología hindú y javanesa. Los turistas pueden asistir a estas representaciones en el Kraton o en otros lugares culturales de la ciudad.

Yogyakarta no solo es rica en cultura y historia, sino también en bellezas naturales. La proximidad del Monte Merapi, uno de los volcanes más activos de Indonesia, ofrece a los aventureros la oportunidad de realizar excursiones y observar la majestuosa vista del volcán. Los tours de jeep en las laderas del Monte Merapi son populares, brindando una experiencia emocionante y educativa sobre la geología y la historia volcánica de la región.

Las playas al sur de Yogyakarta, como Parangtritis y Timang, ofrecen un respiro del ajetreo urbano. Parangtritis es famosa por sus leyendas y rituales, mientras que Timang es conocida por su puente de cuerda que lleva a una pequeña isla rocosa, proporcionando una experiencia emocionante para los visitantes.

La gastronomía de Yogyakarta es otra razón por la cual los turistas se enamoran de la ciudad. La comida javanesa, con su mezcla única de sabores dulces y picantes, deleita el paladar de los visitantes. Platos como gudeg (un guiso de yaca), bakpia (pasteles rellenos) y nasi kucing (arroz en pequeñas porciones) son imperdibles. La calle Malioboro es el lugar ideal para probar la comida local y disfrutar de la vibrante vida nocturna.

A pesar de su rica herencia histórica y cultural, Yogyakarta también tiene una faceta moderna y vibrante. La calle Malioboro es el epicentro de la actividad comercial y turística, donde los visitantes pueden encontrar de todo, desde recuerdos y artesanías hasta ropa y accesorios. Los centros comerciales, cafés y restaurantes modernos complementan la oferta, haciendo de Yogyakarta una ciudad que mezcla perfectamente lo tradicional con lo contemporáneo.

Yogyakarta es, sin duda, un destino turístico completo que ofrece una experiencia inolvidable para todos los visitantes. Desde su riqueza histórica y cultural hasta sus maravillas naturales y delicias culinarias, la ciudad encapsula la esencia de Java y Indonesia en su conjunto. Un viaje a Yogyakarta no solo es una visita a una ciudad, sino un viaje a través del tiempo y las tradiciones, proporcionando recuerdos que perdurarán para toda la vida.

El sector se prepara para la celebración del Día Mundial del Turismo 2022 en Indonesia

Redacción (Madrid)

La cuenta atrás para el Día Mundial del Turismo 2022 ha comenzado, y todos los sectores están invitados a participar activamente en las celebraciones anuales.

Bajo el lema «Repensar el turismo», el Día Internacional se centrará este año en replantear el crecimiento del sector, tanto en términos de alcance como de transcendencia. La República de Indonesia acogerá la celebración oficial (27 de septiembre), aunque se invita a todos los Estados Miembros de la OMT, así como a los no miembros y a las partes interesadas de todo el sector privado, a organizar sus propias celebraciones y a promover este día y su tema principal.

Bajo el lema «Repensar el turismo», Lugares y Más

El secretario general de la OMT, Zurab Pololikashvili, afirma: «El potencial que encierra el turismo es enorme, y tenemos la responsabilidad compartida de velar por su plena materialización. Con ocasión del Día Mundial del Turismo 2022, la OMT hace un llamamiento a todos, desde los trabajadores del sector turístico hasta los propios turistas, así como a las pequeñas empresas, las grandes corporaciones y los gobiernos, para que reflexionen y se replanteen lo que hacemos y cómo lo hacemos.»

Desde 1980, el Día Mundial del Turismo se celebra el 27 de septiembre de cada año,. La fecha marca el aniversario de la adopción, en 1970, de los Estatutos de la Organización que marcaron el camino para la creación de la OMT cinco años más tarde.