Redacción (Madrid)
Los Gobiernos de España y Canarias activarán este mes de febrero la campaña de bonos turísticos para viajar a La Palma durante este 2022, una de las medidas contempladas en el Plan La Palma Renace con la que se pretende reactivar la segunda fuente de riqueza de la economía local en la isla, el turismo.
“Una vez apagado el volcán, el Gobierno de España sigue y seguirá estando comprometido con la reconstrucción de La Palma. El turismo está llamado a ser un aliado importante en el renacer de la Isla Bonita y por eso nos proponemos incentivar los viajes a La Palma tanto desde la Península como desde el extranjero con el fin de contrarrestar el parón y las pérdidas económicas causadas por la erupción del volcán de Cumbre Vieja”, ha explicado el secretario de Estado de Turismo, Fernando Valdés, en la presentación de las medidas en Santa Cruz de la Palma junto a la consejera de Turismo, Industria y Comercio del Gobierno de Canarias, Yaiza Castilla; el consejero de Turismo del Cabildo de La Palma, Raúl Camacho; y el director gerente de Turismo de Islas Canarias, José Juan Lorenzo.
Las medidas turísticas del Plan La Palma Renace engloban tres grandes acciones cofinanciadas entre ambas administraciones: Un programa de bonos turísticos valorado en 5,6 millones de euros, complementado con dos campañas promocionales para el mercado peninsular y el canario a las que se destina 1 millón de euros; y la tercera, una línea de ayudas a la conectividad aérea, con una partida de 2,65 millones de euros. A esto se sumará una campaña de promoción internacional que desarrollará de manera específica Turespaña para la isla de La Palma en mercados europeos con un presupuesto de 200.000 euros.
En la presentación de las medidas en el Palacio Salazar de la capital de la isla, Fernando Valdés ha recordado ha recordado que el Gobierno de España ha movilizado en tiempo récord el 60% de las ayudas aprobadas para los afectados por la erupción del volcán (de un total de 444,6 millones de euros), ayudas que han llegado ya a más de 6.000 personas. Valdés ha enviado un mensaje especial de apoyo y ánimo a todos aquellos palmeros y palmeras a los que el volcán arrebató sus viviendas o negocios. Y también a aquellos que, aun pudiendo regresar a sus hogares, se los están encontrado con daños. “Quiero reiterar que el Ejecutivo seguirá con ellos hasta que recuperen sus proyectos de vida y la isla se recupere por completo”, ha remarcado el secretario de Estado.
“Ahora es el momento de aprovechar la ola de comunicación favorable que existe hacia la isla tanto en península como en el extranjero y convertir el interés social mostrado en actividad turística, haciendo hincapié también en que La Palma ha demostrado ser un destino seguro, tanto a nivel epidemiológico como de riesgo volcánico”, ha valorado la consejera Yaiza Castilla, que ha recordado que estas actuaciones turísticas se sumarán al resto de ayudas ya aprobadas para las pymes y el conjunto de la ciudadanía afectada con el fin de “avanzar hacia la recuperación económica total”.
Consecuencias turísticas
Como consecuencia de la erupción del volcán, el número de pasajeros que llegó a La Palma cayó durante los últimos cuatro meses de 2021 a 107.935 viajeros, frente a los 246.157 de la época prepandemia.
Estos problemas en la conectividad área no impidieron, sin embargo, que los turistas llegaran a la Isla Bonita, muchos de ellos atraídos precisamente por las potentes imágenes que dejaba la erupción. El transporte marítimo aumentó considerablemente los últimos meses de 2021, con un 583,2% más en noviembre de 2021 respecto al mismo mes de 2019 (101.396 pasajeros frente a 14.841).
Además, se produjo un vuelco en cuanto a las nacionalidades de los turistas que pernoctaron en La Palma. Los peninsulares arrebataron a los extranjeros el primer puesto, al representar el 59% del total de viajeros alojados en la isla, seguidos por los residentes canarios, con un 26%, y, finalmente los foráneos, con un 15%.
En cuanto a las plazas alojativas, mientras que en el conjunto del archipiélago al cierre de 2021 ya estaban reabiertas 8 de cada 10, en La Palma el volcán frenó este ritmo y obligó al cierre de los establecimientos, por lo que el año se saldó con sólo 6 de cada 10 plazas abiertas. Asimismo, también descendió el porcentaje de ocupación de estas plazas operativas en la Isla Bonita, que antes de la pandemia era del 60% y que el año pasado sólo alcanzó el 36%.
“Durante 85 días, los palmeros tuvieron que ser testigos de cómo el volcán destrozaba parte de su tierra, de sus propiedades y de sus negocios, de cómo la lava engullía su forma de vida. Fueron momentos muy duros y aún lo son, pero, como ya prometimos entonces, ahora es el momento de propiciar beneficios para sus habitantes”, ha asegurado Castilla.
Bonos de 250 euros
Finalizada la erupción, las dos administraciones activan las medidas incluidas en el Plan La Palma Renace –aprobado en diciembre pasado—y destinadas a reactivar el turismo. Se trata de tres líneas de actuación cofinanciadas a partes iguales por el Ministerio de Industria, Comercio y Turismo y la Consejería de Turismo, Industria y Comercio.
La primera de ellas consiste en un bono turístico específico para la isla, al que se destinarán 5,6 millones de euros y al que podrá optar toda la ciudadanía española mayor de 18 años. Será la empresa pública Turismo de Islas Canarias la que desarrolle el programa. Está previsto que se activen 20.000 bonos valorados en 250 euros cada uno que se podrán gastar hasta final de año en todas las empresas que tengan sede física en La Palma y que estén dadas de alta en el Registro General Turístico en las categorías de alojamiento, restauración, empresas de actividades turísticas, turismo activo y observación de cetáceos, siempre que se hayan adherido previamente al programa.
El sorteo de los bonos se realizará ante notario con una periodicidad mensual, desde marzo hasta septiembre. También se pondrá a disposición de los establecimientos adheridos y de los beneficiarios un servicio de atención telefónica durante los siete días de la semana.